La crónica del Colegio Mayor se inicia el día 7 de octubre del año 1948, cuando las puertas de nuestro Colegio Mayor abrieron por primera vez recibiendo a un nutrido grupo de colegiales que, como hoy en día, se encontraban ansiosos por el comienzo de una nueva etapa universitaria.
El acto de inauguración se realizó como inicio del curso y fue presidido por el entonces ministro de Educación, D. José Ibáñez Martín, siendo acompañado en el acto por el ministro de Marina de Perú, contralmirante Melgar y el primer Director del Colegio Mayor, D. Juan Manzano Manzano. Fechas señaladas al coincidir con la conmemoración del séptimo centenario de la Reconquista de la Ciudad de Sevilla.
Como hace 75 años, y como parte de Sevilla que somos, también celebramos nuestro aniversario al igual que se está haciendo en la ciudad con el 775 aniversario de su Reconquista, pues la fundación del Colegio Mayor Hernando Colón fue un hito dentro de la conmemoración los setecientos años antes citada.
Fue el primer director el Profesor Manzano, también Director de la Sección sevillana del Instituto “Gonzalo Fernández de Oviedo”, dependiente del Patronato “Marcelino Menéndez Pelayo” del C.S.I.C., que tenía entre sus funciones la investigación sobre materias de la Historia de América, quien desde su especialidad y desde esta Institución americanista que dirigía, en unos momentos en que se estaba gestando la creación de varios colegios mayores, propone al rectorado de la universidad, para su curso al Ministerio de Educación, que el nuevo colegio mayor que se proyectaba se denominase “Hernando Colón”.

Razones de tal propuesta, la vinculación de don Hernando con Sevilla: “Hernando Colón (1488-1539), hijo de Cristóbal Colón. Fue un hombre renacentista, amante de la poesía, la música y la pintura, filósofo, historiador del Descubrimiento, biógrafo de su padre y con gran afición a la navegación y a la cosmografía, aunque sin duda su faceta más sobresaliente fue su gran pasión por los libros, reflejada en la formación y organización de su biblioteca, la Librería Fernandina, como quiso que se llamase, la más importante de carácter privado que se conoce de su época, contando a su muerte con más de 15.000 títulos, entre impresos y manuscritos.” (Tomado de la Biblioteca Colombina).
El edificio que alberga al Colegio Mayor fue proyectado por el arquitecto D. José Gómez Millán. Se encuentra ubicado en la calle Sor Gregoria de Santa Teresa, plenamente integrado en el denominado “Campus de Reina Mercedes”, ocupa parte del suelo que se había destinado a la Exposición Universal de 1929, en concreto donde se ubicaba la desaparecida Plaza de los Conquistadores. Por tanto, se encontraba prácticamente en el extrarradio de la ciudad por lo que el edificio destacaba en medio de un descampado, con la única compañía de construcciones de inconfundible estilo levantadas con motivo de dicha Exposición, como el Pabellón Vasco (hoy Hospital Duque del Infantado) o el Pabellón de Córdoba, del que hoy solamente se conserva la torre.

INSTALACIONES

La circunstancia antes indicada hizo posible disponer de una amplia superficie que permitió dotar al Hernando Colón de unas instalaciones de gran calidad. Pero fue la llegada de la Universidad al Sector Sur lo que permitió al Colón dar un gran paso adelante en su consolidación. La creación del “Campus de Reina Mercedes” hizo inmejorable la ubicación del centro, al encontrase a un solo paso de las Escuelas o Facultades situadas en el sector, disponiendo además de un espacio de convivencia y ocio que, hoy en día, se ha convertido en un oasis en medio de la aglomerada urbanización del Campus científico-tecnológico de Reina Mercedes. Lo que en principio era un Colegio Mayor aislado devino en un acertado proyecto de integración en la Universidad.
A lo largo de estas décadas, al ritmo de los nuevos tiempos, se han sucedido en el Colegio Mayor cinefórum, teatros, tertulias cofrades, deportivas y/o taurinas, conciertos básicos y no tan básicos, programas de radio evolucionados a podcast, club de debate, musicales, múltiples actividades deportivas, solidarias, religiosas…
Los colegiales se coordinan en grupos de trabajo, denominados comisiones, en las que se van organizando actividades orientadas a sus especialidades, gustos e intereses. Nos han visitado conferenciantes de la talla de Mario Conde, Nacho Vegas, Manolo Lama, Mikel Muñoz, Pedro Guerra, José Manuel Soto, Abel Moreno, el escritor sevillano José María Javierre, las exministras Celia Villalobos y Soledad Becerril; políticos como don Alfonso Guerra, Julio Anguita, don Juan María Atutxa, doña Cristina Almeida o don Carlos Iturgaiz, por citar algunos más recientes. Y un largo etcétera de personalidades más.

Fuimos pioneros en desarrollar ciclos temáticos de conferencias agrupadas como actividades para convalidar créditos de libre designación reconocidas por la Universidad, entre los que destacaron el Ciclo de Ingeniería y tecnología, las Jornadas de Construcción, el Ciclo de Bob Dylan, o el célebre Ciclo de Arquitectura del Hernando Colón considerado uno de los grandes foros españoles de la arquitectura contemporánea, donde tuvimos el honor de disfrutar de la presencia de grandes figuras del panorama arquitectónico internacional como Eduardo Soto de Moura, Álvaro Siza, Benedetta Tagliabue, Sancho-Madridejos, Alberto Campo Baeza, Emilio Tuñón, Guillermo Vázquez Consuegra, Pep Llinás, Antonio Cruz, Antonio Ortiz y Blanca Lleo entre otros.
Como no podía ser de otra forma, la dimensión social y presencia en la sociedad sevillana ha estado muy presente en este Colegio Mayor. Como evidencian las adhesiones recibidas, mantenemos una estrecha relación con algunas instituciones de reconocido prestigio de la ciudad como la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, la Fundación Cruzcampo, la Hermandad de los Estudiantes o el Club Baloncesto Sevilla, todos ellos Becados de Honor de nuestro Colegio Mayor. El Colegio Mayor Hernando Colón es un servicio de la Universidad de Sevilla dependiente del Vicerrectorado de Servicios Sociales, Campus Saludable, Igualdad y Cooperación, por ello, son muchas las colaboraciones recibidas y ofrendadas con otros servicios como el Servicio de Asistencia Religiosa SARUS, el Servicio de asistencia deportiva SADUS (ambos becados de honor), el Servicio a la comunidad universitaria SACU y/o el Centro de iniciativas culturales CICUS, recientemente galardonado con la medalla de la ciudad.

DISTINCIONES

La Beca de Honor es la máxima distinción que otorga el Colegio Mayor a quien colabora con este centro y a los colegiales más destacados por sus valores. Por nuestra titularidad universitaria le debemos este honor a todos los rectores de la Universidad Hispalense desde la fundación del Colegio Mayor, así como a todos los directores del mismo D. Juan Manzano Manzano (1948-64), D. Francisco Morales Padrón (1964-78), D. José Martínez Gijón (1978-84), D. Manuel Zamora Carranza (1984-85), D. Diego Guevara Benítez (1986-2013) y D. Antonio José Navajas Jiménez, actual director.
Desde aquel momento, esta distinción se les ha concedido a distinguidas personalidades e instituciones, algunas ya mencionadas, siempre por su colaboración. Entre ellas señalamos a D. José María Javierre, D. Juan Del Río, D. Manuel Chaves, Dña. Elena Cano, Dña. Felicidad Loscertales, D. Antonio Caetano y Dña. Rosa Muñoz Román entre otros y a numerosas personalidades de la cultura, el arte, la música, la religión, la política o la universidad.

En estos 75 años, más de 3500 colegiales han pasado por esta casa buscando formarse integralmente. Entre los antiguos colegiales, figuran D. Antonio Gala (escritor), D. Antonio Gullón Ballesteros (Catedrático de Derecho Civil), D. Juan Antonio Carrillo Salcedo (Catedrático de Derecho Internacional), D. Álvaro García Perla (Catedrático de Cirugía Máxilo-Facial), D. José Cuenca Anaya (Embajador en Bulgaria,1983, en la Unión Soviética, 1986 manteniendolo en la Federación de Rusia, 1991, en Grecia, 1993 y en Canadá, 1999). D. Rafael Leña Fernández y D. Enrique Gullón Ballesteros (Notarios ambos), D. José Rojas
Caro (General Auditor del Cuerpo Jurídico Militar), D. Javier Lasarte Álvarez (Catedrático de Hacienda Pública), D. Manuel Ridruejo (Registrador de la Propiedad), D. Francisco del Río Muñoz (Abogado del Estado), D. Carlos Zurita Delgado (Médico y Duque de Soria), D. Rafael Illescas Ortiz (Catedrático de Derecho Mercantil), D. Antonio Moreno Andrade (Magistrado), D. Carlos Lasarte Álvarez (Catedrático de Derecho Civil), D. Jaime Montaner Roselló (Arquitecto, Consejero de infraestructuras Junta de Andalucía), D. Antonio Piñero Piñero (Secretario Judicial, Hermano Mayor de la Hermandad de los Estudiantes y Presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla), D. Juan Gómez Ortega (Rector Universidad de Jaén), D. Álvaro Romero Calvo (Beca Agencia Espacial Europea, actualmente empleado en la NASA) y otros muchos profesionales liberales y empleadas con las destrezas de los valores desarrollados en el Hernando Colón.

DIMENSIÓN SOCIAL

Un capítulo que no podemos obviar es el de la solidaridad. La dimensión social del Colegio Mayor ha estado siempre presente a través de la colaboración con entidades sociales de la ciudad y fuera de ella con el voluntariado promovido entre los colegiales. La Campaña de Navidad del Hernando Colón es el último reducto de la tradicional Campaña de Navidad del SARUS que ideara D. Juan del Río y que desde entonces se ha ido desarrollando de manera ininterrumpida hasta nuestros días. Recientemente los beneficios recaudados, se han destinado al proyecto ONNA Programa de Intervención Integral de las hermandas Adoratrices de la avenida de la Palmera, que trabaja

Un capítulo que no podemos obviar es el de la solidaridad. La dimensión social del Colegio Mayor ha estado siempre presente a través de la colaboración con entidades sociales de la ciudad y fuera de ella con el voluntariado promovido entre los colegiales. La Campaña de Navidad del Hernando Colón es el último reducto de la tradicional Campaña de Navidad del SARUS que ideara D. Juan del Río y que desde entonces se ha ido desarrollando de manera ininterrumpida hasta nuestros días.

Recientemente los beneficios recaudados, se han destinado al proyecto ONNA Programa de Intervención Integral de las hermandas Adoratrices de la avenida de la Palmera, que trabaja en la acogida y acompañamiento de mujeres jóvenes en contextos de prostitución, víctimas de trata con fines de explotación sexual; “El sueño de Vicky” Fundación para la investigación del cáncer Infantil, AECC Asociación Española Contra el Cáncer y “El camino de Valentina” Asociación que colabora con la investigación de la enfermedad CNTNAP1 de la niña Valentina, natural de Los Barrios (Cádiz).
A esto hay que sumar campañas de recogida de alimentos entre los colegiales, participación en las del banco de alimentos, campañas de donación de sangre, conciertos solidarios y multitud de otros eventos cuya recaudación se destina entre otros a Cáritas Universitaria por su singularidad y actuación en el entorno universitario, con quien actualmente se desarrollan muchos programas de voluntariado.

Nuestro compromiso por la calidad y la excelencia en estos 75 años se ha visto reconocida por organizaciones de control y verificación externos. La Dirección del Colegio Mayor Hernando Colón decidió adoptar, en 2005, el Modelo EFQM como marco de referencia para mejorar los procesos, servicios y resultados del centro. En el ámbito de la imagen externa, en Europa existe un sistema de reconocimiento formal (que en España es gestionado por el Club de Excelencia en Gestión) para aquellas organizaciones que deseen poseer un distintivo de reconocimiento de su Excelencia en la gestión. Este distintivo es en forma de Sello de Excelencia, del que existen 4 categorías en función del grado de cumplimiento del Modelo: 200+, 300+, 400+ y, la máxima, 500+. A los máximos niveles del Sello sólo consiguen acceder aquellas organizaciones que demuestran unos resultados excelentes y sostenidos durante una serie de años, como es el caso de nuestro Colegio Mayor, que consiguió el Sello de Excelencia en Gestión 500+, habiendo sido el primer Colegio Mayor en obtenerlo allá por el año 2016.

Este reconocimiento solo refleja nuestro compromiso actual por ofrecer la mejor formación y servicio a nuestros colegiales, pero es de gran consideración pues no son muy numerosas las instituciones educativas de nuestro perfil que tienen reconocidos tales estándares oficiales de calidad.
Creemos honestamente que pocas cosas tienen tanto sentido como la Educación Superior, motor del progreso de la Sociedad en su conjunto. Y tenemos la certeza de que nos dedicamos a algo grande, que nuestro tiempo en la Universidad tiene sentido. Y lo llena de justicia y de valor, hacerlo desde un espacio público abierto a todos.
El canónigo sevillano Rodrigo Fernández de Santaella, más conocido por Maese Rodrigo, cuya estatua está en el primer patio de nuestro rectorado, era un devoto del sistema colegial de la Universidad de Salamanca puesto en marcha por Diego de Anaya Maldonado, el fundador en 1402 del primer colegio mayor de España, el colegio de San Bartolomé. Maese Rodrigo obtuvo en 1502 la bendición de los Reyes Católicos, e hizo todo lo posible por importar el modelo salmantino a Sevilla. Para tal fin, adquirió en 1503 una hacienda junto a la Puerta de Jerez, en la que se edificaría lo que iba a ser el embrión de la Universidad de
Sevilla: el Colegio de Santa María de Jesús.
Maese Rodrigo soñó un colegio al que pudieran acceder estudiantes de diferentes disciplinas, conviviendo y estudiando en comunidad según el modelo salmantino, él soñó una primitiva comunidad de aprendizaje.
Desde esa primitiva comunidad de aprendizaje hasta nuestros días, nuestra sociedad ha experimentado muchos cambios, en los últimos años a un ritmo vertiginoso y nuestra Universidad ha sabido adaptarse a esos cambios, para poder servir a la sociedad adecuadamente sin perder su misión de creación y difusión del conocimiento.
Como en la Universidad, en nuestro Colegio Mayor, el Hernando Colón, también hemos sabido adaptarnos a los cambios que se nos ha ido demandando. Como ejemplo de ello, nuestra transformación a mixto, la cual realizamos en el 2014, sin estridencias, sin complejos, y con total naturalidad.
En el contexto educativo que vivimos tenemos una enorme ventaja: Somos comunidades de aprendizaje, aquello que soñó Maese Rodrigo, lugares con personas, con jóvenes que aprenden, que crecen y se desarrollan en comunidad.
Somos el ejemplo perfecto de educación permanente y en competencias, es decir, experiencias significativas de aprendizaje, tanto formales como informales, entre las que destaca sobre todas una esencial: el arte de la convivencia.
Hemos podido sobrevivir al paso del tiempo, al haber logrado atraer a colegiales que compartan un ideal y lo hagan suyo. Si falta alguno de estos factores (―Proyecto universitario y cultural ―Colegiales comprometidos ―Entusiasmo), languideceremos y acabaremos desapareciendo o siendo sustituidos por otros modelos de alojamiento.

Ofrecemos un enorme dinamismo, capacidad de innovación y emprendimiento, predisposición y familiaridad con el trabajo en equipo, facilidad de adaptación a entornos multiculturales y aceptación de la diversidad y la diferencia. Somos la puerta que proyecta esta magnífica ciudad a todos nuestros colegiales incentivándolos no solo a que estudien en Sevilla, sino a que viva en ella y la descubran. Colegiales a los que Sevilla acogió en su etapa universitaria y a muchos de ellos también después de la misma, pues se convirtieron en ciudadanos de ella. Baste este sencillo recorrido para evidenciar los méritos de este Colegio Mayor, que ha llevado a los miembros de su comunidad a solicitar como reconocimiento la Medalla de la ciudad de Sevilla. El trabajo de formación en favor de la comunidad, y en particular de la universitaria, unido al compromiso solidario, son signos de su positiva influencia en estos 75 años de vida en la ciudad de Sevilla.